Publicado: 28/01/21
Categoría: Gadgets

Todos los usuarios de Switch coinciden: en el momento en el que se te estropea el Joy-Con es imposible volver a jugar a gusto, y esto pasa mucho más de lo que nos gustaría reconocer.

Es demasiado habitual que el pequeño joystick se quede ‘pillado’ hacia alguno de los lados, arruinando nuestra experiencia de juego. Esto implica tener que comprar un par nuevo de Joy-Cons, que cuesta 80 euros.

Es por ello que la Organización Europea de Consumidores llevará a cabo una investigación para esclarecer si se trata de «obsolescencia prematura y omisiones de la información», porque ya han recibido más de 25.000 denuncias de usuarios de todos los países del continente.

El objetivo de la organización es que Nintendo acceda a reparar gratuitamente este problema y que informe a los consumidores de la «duración limitada» del producto, puesto que el 88% de los jugadores de Switch sufre esto en los primeros dos años.